¿Quién puede amar tánto una fotografía como para dar sus ahorros por una cámara?
Una simple cámara, un objeto electronico, lleno de botones, una simple pantalla, un objetivo y un flash.
¿Quién lo daría todo por ser una profesional en este arte?
Yo.
Yo me leería la enciclopedia fotográfica, yo daría todo el dinero del mundo por una cámara.
Soy yo, la que desea enfocar, la que desea perfeccionar fotografías, la que desea darle al disparador.
Y no me hace falta que mis fotografías sean de concurso o exponerlas al mundo, como para saber que es mi pasión.
Que es mi pasión tener una cámara entre mis manos..
Pero hoy en día, ¿Quién no fotografía por moda? ¿Quién se encuentra con suficiente personalidad como para encontrar su fuerte de ocio? Nadie.
Pero yo? Yo he descubierto, qué quiero.
Yo, y mis fotografías.
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