Pero hoy no sé qué decir, lo prometo. Estás aquí, y yo sigo preocupándome por si te vas. Y si, es estúpido, pero yo estoy sin fuerzas, y mi cuerpo se cae, y no sé si soy demasiado, demasiado poco, y tu eres demasiado mucho.
Antes.. hace mucho tiempo, vivía por mi, por mis pensamientos, mis problemas, por mi suerte, por mi bien, por mi cuenta, vivía por y para mi. Pasaba algo, y yo era mi primer pensamiento. Sí, mis amigos, mi familia.. también.
Hasta que aquel día te vi, te tuve que ver, y qué coño sé yo si era el destino, o lo mejor que me pasaría, qué coño sabía yo si era el destino, o era la putada de la vida.
Y no me empeñaba en averiguarlo, porque los días iban pasando, y tú seguías en mi cabeza, imposible sacarte, y prometo, juro y perjuro que lo intenté entre un millón y dos millones de veces. Pero los días seguían pasando, las horas, los minutos, y cada segundo me daba más cuenta de que no ibas a salir de ahí, y sin aceptarlo, seguían pasando los días. Es que estabas ahí, en mi cabeza, pero jamás lo acepté.
Hasta que empecé a llorar, una noche, dos noches, tres noches, y así acabando por todas. Lloraba hasta durmiendo, y lo peor es que aún no me preguntaba por qué. Y estabas ahí, pero aceptarlo era demasiado.
Cuando se me acabaron las lágrimas, lo acepté. Estabas metido ahí, y yo no sabía como sacarte, a punto de echar a perder la cabeza con tal de sacarte, y ni si quiera eso me sirvió de algo. ¿Pensar en tenerte...? Cada día. Y no me olvido de lo duro que fue y las lágrimas que solté. Cuántas veces puse a secar la almohada.
¿Pero sabes qué es lo que me da más coraje de todo esto? Tenerte, y seguir poniendo a secar la almohada, por el miedo a perder. Lo peor de todo ahora es saber que estás aquí y que puedes irte cuando quieras, y lo peor es que de mi cabeza es imposible que te vayas.
Porque.. a lo largo del día suelo cruzarme con un promedio de 30 tíos más, de 30, 40, y hasta 50. Calle, colegio, y mis propios amigos. ¿Y? Para mi solo hay uno. Ya puede pasar por mi lado un gnomo con las orejas hasta el cielo, como si pasa Brad Pit, ya pueden pasar una banda de mil tíos todos diferentes, que tu sin estar entre ellos, me quedo contigo.
Ya sé lo que puedes pensar, no tiene sentido, voy de loca, pero... Por una vez, solo por una vez, ten tanto miedo como yo tengo, y piensa cuántas veces vas a temblar, entonces sabrás si valdrá la pena. Voy a escuchar cosas como 'No tiene sentido, te quiero a ti', quiero palabras de corazón, quiero tus palabras, y las voy a querer siempre, sean buenas, malas o llene un mar llorando, pero las quiero que salgan del corazón. Que seas tú, tú con tu bordería, con tu forma de ser, de hablar, de quererme, que seas como siempre, feliz. Quiero que sigas siendo como has sido siempre, el amor de mi vida, y por favor, solo voy a pedirte un par de cosas:
No quiero volver a secar más la almohada, no me falles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario